La isla de Murter, cuyo punto más alto alcanza solo 125 metros sobre el nivel del mar, se encuentra en el acuario de Šibenik y está conectada al continente por un puente. Murter se puede considerar una especie de entrada al famoso Parque Nacional de Kornati, un grupo de islas que parecen perlas esparcidas en el mar, que dejan sin aliento a cada visitante. Con poco más de cinco mil habitantes, hoy en día la mayoría se dedica al turismo, pero no ha olvidado su tradición pesquera, así como la agricultura y la producción de aceite de oliva. Parte de esa tradición y cultura sigue viva a través de numerosos eventos que se organizan durante la temporada de verano para dar a conocer a los turistas la forma de vida antigua en la isla.
La isla está impregnada de una rica historia, como lo demuestran los numerosos restos de diversas construcciones de la antigüedad y la Edad Media. Ha tenido diferentes roles, desde ser un lugar de descanso en la época del Imperio Romano hasta desempeñar funciones defensivas y de vigilancia durante el dominio de la República de Venecia. A pesar de su dinámica historia, este no es un lugar donde tendrás unas vacaciones dinámicas. Al contrario, esta isla es el lugar perfecto para alcanzar la paz interior y disfrutar de las bellezas naturales junto a alguna delicia gastronómica. Gracias a numerosos eventos, festivales y la cercanía del Parque Nacional, la isla ha gozado de gran popularidad en los últimos años, pero sigue siendo un destino adecuado para unas vacaciones tranquilas, ya que aquí todavía es más fácil encontrar un rincón tranquilo que, por ejemplo, en las demasiado conocidas islas turísticas de Brač y Hvar.
Para llegar a la isla no necesitas hacer cola para el ferry, ya que está conectada por un puente levadizo construido en el siglo XIX con un lugar llamado Tisno. Este lugar es peculiar porque, desde el punto de vista administrativo, una parte se encuentra en tierra firme y la otra en la isla. Hay otro hecho interesante relacionado con esta isla: en cada uno de los cuatro lugares de la isla se habla un dialecto diferente. Es decir, hay algunas palabras que se pronuncian de manera diferente en todos los lugares. ¿Y cuáles son las curiosidades que deberías visitar si te encuentras en la isla?
Fortaleza de Tureta
Si te gusta visitar los lugares más importantes en cada destino que encuentres, la fortaleza de Tureta es una construcción imprescindible que te dejará boquiabierto. Este edificio que desafía al tiempo fue mandado construir por el emperador Justiniano alrededor del siglo VI, en un momento en que el Adriático volvió a convertirse en una importante vía de comunicación. Se supone que tenía una función militar, es decir, controlaba la ruta marítima y fue abandonada durante la Edad Media. Este tipo de edificios eran comunes en esa época. El emperador Justiniano ideó el llamado "limes Maritimus", en otras palabras, un sistema de fortalezas cuyo objetivo era proteger la ruta marítima, y la fortaleza de Tureta era una de estas fortificaciones. Es especial precisamente porque es uno de los restos mejor conservados que representan fielmente los métodos de construcción bizantina. Tras una investigación arqueológica más detallada en el área cerca de la fortaleza, también se encontraron numerosos restos de cerámica (como, por ejemplo, ánforas). Lo que también te impresionará es la hermosa vista del archipiélago de Kornati y del mar Adriático.
Un paseo por el centro de la ciudad
El centro de la ciudad de Murter se caracteriza por haber logrado conservar su singular aspecto histórico. La mejor prueba de ello es la Iglesia Parroquial de San Duh, construida en el siglo XVI y restaurada en estilo barroco en el siglo XVII. También vale la pena mencionar la iglesia de Nuestra Señora de la Salud, que fue construida en el estilo del barroco mediterráneo. Si quieres saber cómo era la vida en la isla en el pasado, deberías visitar el Viejo Molino. Antiguamente era una almazara donde se producía aceite de oliva, y hoy en día se ha convertido en un establecimiento de hostelería. Es la oportunidad perfecta para adquirir experiencia local junto a delicias caseras y una copa de vino autóctono. Cabe mencionar que Murter es una isla rica en higos. Muchos árboles se encuentran en el centro de la ciudad, concretamente en espacios públicos, así que en verano puedes recoger algunos higos libremente para refrescarte.
Una vista impresionante desde el mirador
Una de las mejores maneras de documentar todas las bellezas de un destino es a través de la fotografía. Para capturar las mejores imágenes que convencerán a tus seres queridos sobre las maravillas de Murter, deberías escalar una de las muchas colinas que esconden vistas únicas. Es importante mencionar que no todos los senderos que conducen a estos miradores están bien señalizados, y la mejor y más fácil manera de llegar a uno es preguntar a los lugareños por la dirección. El primer mirador que debes visitar es también el punto más alto de toda la isla. Se trata del mirador Raduč, que tiene una altura de aproximadamente 125 m. Además de disfrutar de una vista impresionante que se extiende hasta el macizo de Velebit, también te intrigarán los túneles que desempeñaron una función importante durante la Segunda Guerra Mundial. El mirador en la colina Vršine también es interesante porque, además de ser un excelente telón de fondo para fotografiar, es un lugar donde se celebran diversas manifestaciones culturales durante los meses de verano.
Gajets: barcos que significan vida
Venecia es conocida por sus góndolas, mientras que Murter lo es por sus gajetas. Estas son embarcaciones que permitieron a la población local navegar hacia Kornati, y que servían principalmente para la pesca y el transporte de mercancías. Son uno de los pocos barcos que han mantenido su forma original y que han conservado la madera como único material. Las gajetas tienen vela, pero además de la fuerza del viento, también se requería la fuerza humana, es decir, el remo. Para comprender la verdadera importancia de estos barcos para la población local, deberías visitar el lugar llamado Betina. Allí se encuentra un museo cultural e histórico protegido que te revelará muchos secretos de la construcción naval tradicional, así como las tendencias y tecnologías modernas en este ámbito.
Slanica: la playa más famosa de Murter
Debido a su cristalino mar, Murter es un verdadero imán para todos los bañistas. La playa que debes visitar se llama Slanica. Es la playa más conocida de Murter, cuya base de arena y su mar turquesa son la combinación perfecta para unas vacaciones de verano. Dado que la playa es popular, puedes esperar multitudes, pero si necesitas más espacio, puedes dirigirte a las cercanas rocas, sobre las cuales se extiende un pinar que te ofrecerá sombra y el refresco necesario del intenso calor. La playa es adecuada porque también hay una rica oferta de servicios en las cercanías, incluyendo establecimientos de hostelería, así como un tobogán y un parque infantil para los niños.
